Anécdotas (III)
Aportes de Mario Guido Pérez:
En una ocasión varias señoritas aristocráticas del pueblo organizaron un viaje a Buenos Aires. Al llegar el tren, todos los acompañantes subieron a tomar un "copetín" (algo común en esos tiempos), mientras los que viajaban se quedaron abajo charlando con amigos. El tren arrancó de repente, y tuvieron que salir en un par de autos a perseguirlo, logrando alcanzarlo en la siguiente estación (San Joaquín), para que bajaran los que viajaban, que no eran los viajeros, y que subieran los viajeros, que en ese momento no viajaban en el tren (valga el juego de palabras).
El señor Juan Pena (tío de Mario) tenía un humor muy particular y mucha inventiva Decía que se frustró un gran negocio que pensaban instalar con una familia amiga de apellido Mas, que vivía en la zona. La propuesta era poner una funeraria, y denominarla con ambos apellidos: “Mas Pena”.
En una ocasión varias señoritas aristocráticas del pueblo organizaron un viaje a Buenos Aires. Al llegar el tren, todos los acompañantes subieron a tomar un "copetín" (algo común en esos tiempos), mientras los que viajaban se quedaron abajo charlando con amigos. El tren arrancó de repente, y tuvieron que salir en un par de autos a perseguirlo, logrando alcanzarlo en la siguiente estación (San Joaquín), para que bajaran los que viajaban, que no eran los viajeros, y que subieran los viajeros, que en ese momento no viajaban en el tren (valga el juego de palabras).
El señor Juan Pena (tío de Mario) tenía un humor muy particular y mucha inventiva Decía que se frustró un gran negocio que pensaban instalar con una familia amiga de apellido Mas, que vivía en la zona. La propuesta era poner una funeraria, y denominarla con ambos apellidos: “Mas Pena”.
Etiquetas: Curiosidades, Sociedad